lunes, 25 de abril de 2022

Los CI

 Capítulo 1

En muchos oficios es importante tener una formación, destacan dos aspectos negativos en relación al docente: un profesor no es bueno si desconoce la materia que enseña y que aunque tenga muchos conocimientos no es nada significativo.

Distintas investigaciones han demostrado que con frecuencia, los expertos en una disciplina encuentran dificultades para enseñarle a los novatos. Los expertos pueden volverse sensibles frente a la dificultad de enseñar a principiantes, este efecto se denomina "maldición de conocimiento". El autor Hinds demostró que, a medida que las personas adquieren destrezas, empiezan a subestimar la dificultad de esa adquisición.

Puede ser que los expertos no sepan lo que están haciendo, porque las habilidades son inconscientes. Se realizó un estudio laboratorio en el que se pidió a unos estudiantes de electrónica que realizaran instrucciones para que los principiantes probaran un circuito, los alumnos que estaban en los últimos cursos de universidad tenían más experiencia que los que estaban en los primeros cursos. Esto era notatorio en la forma de hablar y la eficacia. En conclusión, la forma de enseñar a los expertos puede provocar a veces problemas de aprendizaje.

Conocer el currículo permite al profesor dar opciones a los alumnos que ellos valorarán positivamente como competencia básica del docente.


Capítulo 2

A la hora de establecer una asignatura está asociada a la propia indagación que incluye una serie de actividades que se dan durante el curso (exámenes, proyectos, etc). Los alumnos se preguntan por qué dan una asignatura y que importancia toman sus contenidos.

El filósofo Rousseau nos transmite la idea de que a los niños no se les debe exigir nada a los niños por obediencia. Rousseau directamente piensa en el «interés»,  si a una alumna no le interesa lo que está aprendiendo en clase, no se le va a ocurrir preguntar por qué tiene que aprenderlo. John Dewey, el filósofo de la educación, piensa que «interés» se encuentra unido a «necesidad». En cualquier asignatura podemos preguntarnos ¿por qué tengo que aprenderlo? La respuesta a esa pregunta está en el interés previo que posee el estudiante.

Dewey nos contempla a los seres humanos como organismos biológicos que intervenimos en nuestro ambiente, es decir utilizamos patrones, hábitos para cubrir necesidades. El equilibrio surge de la irrupción de una interacción continuada con nuestro mundo y eso es lo que motiva el aprendizaje.

El problema que surge con las asignaturas es la obligatoriedad que conllevan, los alumnos entonces se preguntan cuál es su utilidad y valor. Los contenidos arbitrarios actuales no despiertan interés en los alumnos ni curiosidad, lo cual es un problema ya que no asientan los conocimientos adecuadamente.

La indagación está compuesto por una serie de fases:

    - leer: elige la lectura y establece un orden de importancia

    - actividades de clase: el profesor organiza las diferentes actividades de clase que se caracterizan por el profesor como figura guía para que aprendan los conceptos más importantes.

    - escritura: se trata de la última fase y está compuesto por dos dimensiones que son implantar una estructura con la finalidad de que los estudiantes respondan a los ensayos de los demás; planear los trabajos escritos asignados.

En cuanto a indagación acumulativa se basa en repetir actividades semanales. Los estudiantes empezarán a pensar sobre Sócrates. 

Capítulo 3

No tiene sentido transmitir ideas sin contener una clara verdad e incluso es esencial estimular a los niños mediante la reflexión y sus experiencias, que están asociadas con un aprendizaje positivo, puesto que permanecerá en el futuro lo que nos ha hecho realmente pensar y lo que nos ha preocupado. En relación al aprendizaje, a lo largo del tiempo nos ha marcado en muchos sentidos  una figura docente.

La enseñanza, raramente plantea con vigor los objetivos que persigue, y existe muy poca Reflexión sobre lo que hay que transmitir. En el ámbito educativo, se implica habitualmente la transmisión de conocimientos al papel y examen como instrumento de confirmación de lo aprendido, pero, ¿qué pasa con esos conocimientos después de un tiempo? Finkel afirmaba que narrar, era ineficaz para ensañar las cosas que parecían importantes. Uno de los pasos que finkel propone es dejar que los estudiantes hablen, es fundamental que ellos tengan el mayor protagonismo a base de técnicas e instrumentos para buscar respuestas a problemas y fomentar el aprendizaje

A través del seminario, los estudiantes hablan más frecuentemente. El papel del profesor en ese contexto debe ser de estar preparados para dar lo mejor de sí mismos y de esta forma, conseguir los objetivos. Además, deben actuar como referentes para que no se desvíe el tema, además de ir planteando preguntas y ayudar a los alumnos a mantener una conversación fluida y ordenada. Se propone "enseñar con la pintura", de esta forma, los alumnos se paran a reflexionar, lo cual les ayuda a comprender lo que se dice.  Otra sugerencia es la interacción entre alumnos y profesores, y de los alumnos entre ellos, ya que les permite sumergirse en la fase del descubrimiento.

La conclusión que extraemos de Dewey es que tal y como dice él la educación no es algo que deba ser narrado, sino debe ser  un proceso activo y constructivo centrado en la experiencia que es de la qué realmente aprenden los alumnos. 



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